viernes, 18 de mayo de 2012

Phil Mickelson ingresó a Salón de la Fama

Quizás algún día llegue el momento en que Phil Mickelson disfrutará contar sus anécdotas. El momento en que nos cuente sobre su victoria como amateur, o sobre ese salto tan cómico como bajo cuando metió el putt que le permitió ganar su primer Masters, o las veces en que se quedó tan cerca en otros majors.

Hay tantas cosas para recordar, tanta nostalgia, tantos ingredientes que componen una carrera como golfista digna del Salón de la Fama.


AP Photo/Eric KayneNo había dudas que Phil Mickelson merecía un lugar en el Salón de la Fama. Pero muchos creen que es demasiado pronto para aceptarlo.

Todo esto convierte a su inducción al Salón de la Fama Mundial del Golf en la ciudad de St. Augustine, Florida, bueno, un poco raro.

Mickelson, 41, fue un contendiente al título en el Masters del mes pasado y finalizó tercero a pesar del triple-bogey durante la última ronda que eventualmente le terminó costando un lugar en el playoff. Y ya está pensando en el U.S. Open, donde salió segundo en cinco ocasiones, una cifra record.

"Pienso que es un gran honor", dijo Mickelson. "Y pienso que el golf tiene la particularidad de que sus jugadores prolongan sus carreras más que en cualquier otro deporte. Creo que deberían pensar en volver a poner a los 50 (como edad mínima) ya que el Salón de la Fama es una oportunidad para reflexionar sobre tu carrera.

"Y yo todavía estoy en la etapa de mi carrera durante la cual sigo mirando hacia adelante, buscando nuevos torneos y nuevas oportunidades. Me gustaría poder reflexionar más, pero de todas maneras es un gran honor".

Mickelson ingresó al Salón junto al escoces Sandy Lyle, ganador de dos majors, la tres veces ganadora del U.S. Open femenino Hollis Stacy, el periodista Dan Jenkins y el comentarista Peter Alliss.

"Lefty" se convirtió en jugador seleccionable para el Salón después de haber cumplido 40 años, y no quedaban dudas de que iba a ingresar en su primer intento debido a sus 40 victorias actuales en el Tour de la PGA que incluyen cuatro majors. Solamente Tiger Woods y las 72 victorias en su carrera lo superan entre jugadores activos.

Mickelson alcanzó a Cary Middlecoff en el noveno lugar de la historia de la PGA tras prevalecer en Pebble Beach en febrero. Él ahora se ubica a cinco de Walter Hagen. Era la decisión más simple que pudiese existir para los votantes.

Aun así el jugador sigue compitiendo, es algo extraño. Ernie Els lidió con los mismos sentimientos cuando fue inducido al Salón teniendo casi la misma edad. Els estaba dando un discurso de aceptación el lunes por la noche y tres días después estaba jugando en el Players Championship.

"Fue una sorpresa", dijo Els sobre cuando se enteró de su inducción. "Pensé, en un principio, que tenías que ser un poco más viejo".

Ha habido reclamos para cambiar la edad mínima de ingreso para separar más a los jugadores de sus carreras como jugadores. El béisbol y el fútbol americano, por ejemplo, tienen un plazo de espera de cinco años antes de que un jugador retirado pueda ser candidato a ingresar al Salón de la Fama. Sin embargo, como los golfistas típicamente no anuncian su "retiro", suena más simple hacer a la edad mínima 45 o hasta 50 años.

"Todos nos sentamos y vemos esos discursos de los tipos que entran al Salón de la Fama del fútbol americano o al de béisbol y no están jugando", dijo Jim "Bones" Mackay, el caddie de Mickelson desde hace mucho tiempo. "Y aquí está Phil, quien de veras quiere ganar esta semana, y la próxima, y la próxima. Estoy seguro de que significa mucho para él, pero él sigue jugando un par de días después".

Mackay ha estado junto a Mickelson durante casi toda su carrera. La única victoria que se perdió fue la primera, cuando Mickelson era un amateur de la Universidad de Arizona State y ganó el Abierto de Tucson. Él comenzó a ser el caddie de "Lefty" en la eliminatoria seccional rumbo al U.S. Open de 1992, cuando Mickelson clasificó para su primer torneo profesional en Pebble Beach.

Él ha visto los puntos altos, como los tres títulos en el Masters, la victoria en el PGA Championship del 2005, los segundos puestos en cinco U.S. Opens y la improbable remontada en el Abierto Británico del año pasado. Mackay bromeó diciendo que ya está demasiado viejo para recordarlos a todos ahora, ya que por supuesto, hay demasiados de ellos.

"Tendría que estar loco para pensar que hubiese trabajado para el tipo por 20 años", dijo Mackay, de 46 años de edad. "¿Cuáles son las probabilidades de ello? Es un lindo número y es lindo, y pienso que todo este año tras ganar Pebble era ganar el Masters. Puedo ver porque piensa de la manera que piensa. Él ha ganado muchos torneos y es un hombre dispuesto a competir a un nivel muy alto por unos años más".

Mickelson ha logrado todo esto sin jamás haber sido el número uno del mundo, nunca haber ganado el título de ganancias del PGA, nunca haber tenido el promedio de puntos más bajo del tour, nunca haber ganado la Copa Fedex y nunca haber sido votado como jugador del año.

Parte de eso es haber jugado en la era de Tiger Woods. Tiger le quitó la posibilidad de ganar muchos galardones. Sin embargo, a Mickelson siempre le ha gustado jugar contra Woods y lo ha elogiado por atraer tanto dinero y atención hacia el golf.

Y buscar más.

"Siento que los próximos cinco años podrían ser los mejores de mi carrera", dijo Mickelson. "Sigo expectante a lo que pueda suceder en los próximos cinco años, sino más".

"Lo que estoy haciendo no es reflexionar sobre mis logros, sino que sobre lo que el golf ha significado para mí. Ha significado tanto para mí a nivel personal, no solo por lo que ha hecho como trabajo, pero la gente que he conocido gracias a este deporte, los lugares a los que me ha llevado, simplemente las oportunidades que el juego me ha provisto".

"Ni hablar de lo importante que ha sido el golf en mi vida para afrontar problemas personales; cuando (su esposa) Amy se enfermó (diagnosticada con cáncer de seno), lo importante que fue para mí jugar al golf y de alguna manera lidiar con mis propios pensamientos o solamente practicar o tener una o dos horas a solas en el campo de juego para aclarar mis pensamientos. Simplemente era una parte importante de mi vida"

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